Por su carácter transversal, la ciencia, la tecnología y la innovación son herramientas fundamentales para mejorar la calidad de vida de las personas y lograr el cumplimiento de sus derechos humanos. Con un enfoque renovado, la Ciudad de México está instrumentando una estrategia de modernización tecnológica con el f in de acercar a las y los ciudadanos a los servicios de la metrópolis. Desde 2019, la capital cuenta con la Agencia Digital de Innovación Pública (ADIP), encargada de proveer soluciones tecnológicas para el gobierno; fomentar la transparencia, el gobierno abierto, la participación ciudadana y la inclusión digital; crear infraestructura y habilitar la conectividad; así como simplificar trámites, servicios y optimizar la atención ciudadana.
Para lograr un gobierno abierto y la digitalización de los servicios, se han utilizado herramientas tecnológicas para transparentar la información, los gastos y las compras del gobierno, gracias a mecanismos como Tianguis Digital; y garantizar una mayor participación ciudadana a través de plataformas como Plaza Pública –que permite expresar opiniones y propuestas o discutir temas de interés público– y de aplicaciones que reducen los tiempos de interacción y los registros en papel, mismas que han sido de utilidad durante la emergencia sanitaria por la pandemia de COVID-19 para eliminar las cadenas de contagio. Hacia el futuro, el reto es mantener estas plataformas actualizadas y funcionales para asegurar su sostenibilidad y la atención al público.
Con la intención de que la inclusión digital sea un medio de democratización al acceso a la tecnología, comunicación e información, la Ciudad de México cuenta con 13,694 puntos de conectividad gratuita de Internet, además de aumentarse la velocidad de acceso. Con ello, se coloca como la segunda urbe del mundo con más puntos de acceso gratuitos a Internet, solo después de Moscú. Y, por este avance en la infraestructura, ganó el premio WSIS 2020 de la Unión Internacional de Telecomunicaciones. La megalópolis también posee importantes capacidades científico-tecnológicas al albergar universidades y centros de investigación públicos y privados. La creación de la Red ECOS, de la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación, tiene como objetivo articular esfuerzos y capacidades para potenciar la interfaz ciencia-política y sustentar las soluciones de los problemas de la metrópoli en evidencia científica y aplicación tecnológica.
La pandemia de COVID-19 mostró la importancia de la digitalización como habilitadora de derechos humanos. El uso de herramientas digitales fue central para el seguimiento de casos de contagio del virus SARS-COV-2, para la provisión de servicios como la telemedicina y la educación, el suministro de bienes perecederos y demás productos, y el fortalecimiento de redes comunitarias o vecinales, entre otros. Por esto, es necesario fomentar la alfabetización digital a fin de facilitar el acceso a herramientas digitales de interacción con las autoridades en un contexto de recuperación económica y protección a la salud.
La Ciudad de México está trabajando para que la digitalización se convierta en una herramienta clave para la conectividad escolar, pues aún quedan muchos retos para que las escuelas públicas de nivel básico estén equipadas con computadoras y conexión a Internet que posibiliten una mejor enseñanza. Durante el confinamiento por la pandemia de COVID-19 se hicieron evidentes las limitaciones de las familias que no contaban con computadoras o acceso a Internet para satisfacer las necesidades de aprendizaje de sus hijos e hijas, por lo que, ante situaciones inéditas de emergencia sanitaria o desastres naturales, la capital desarrolla estrategias que aseguren a plenitud el derecho a la educación y a la digitalización.
En materia de justicia se ha visto la importancia de la digitalización en procesos de denuncia de delitos, pues la denuncia digital ha ayudado a reducir tanto la presión de los ministerios públicos, como los actos de corrupción y opacidad en la información por trámites presenciales, al tiempo que se busca garantizar la seguridad de la identidad de las personas. Desde 2019, han comenzado a atenderse delitos como robo sin violencia, robo de vehículos y autopartes, usurpación de identidad y fraude, violencia familiar, sustracción de menores, discriminación y robo simple. “Hazme Valer” es otro programa que permite a personas privadas de su libertad y a sus familiares realizar trámites de manera ágil y rápida, tal como la modificación de la lista de personas que pueden visitarlos
Información complementaria
En este caminar hacia una ciudad abierta, la gestión de datos es fundamental como una herramienta de acceso a la información, transparencia, toma de decisiones y participación de múltiples actores como ciudadanos, organizaciones sociales y académicas, el sector privado y el gobierno. Portal de Datos Abiertos es una plataforma de acceso, uso, reutilización y redistribución de datos, procurando tener la mayor desagregación de información posible. Además, permite la consulta, análisis, mapeo y descarga de información de temas relacionados con programas gubernamentales para la conservación del suelo y áreas naturales, la calidad del aire, niveles de radiación solar y presión atmosférica, afluencia de transporte y tránsito vehicular, vías de comunicación, parquímetros y cicloestaciones, localización de hospitales, inventario de acciones sociales, ubicación de sitios WiFi, seguridad vial, seguridad pública, ubicación de mercados públicos, programas de f inanciamiento a microempresas, turismo y rendición de cuentas, entre otros temas. El uso de herramientas como el código abierto, permite compartir los avances de la Ciudad de México con otros gobiernos locales, en un esfuerzo de cooperación e intercambio de experiencias y buenas prácticas.
En este esfuerzo, la capital trabaja por incorporar información sistematizada que dé cuenta de los avances y desafíos de la gran urbe respecto a sus compromisos con el cumplimiento de las metas y agendas globales de desarrollo.
Información complementaria
Creada para promover la investigación científica, el conocimiento innovador y el desarrollo tecnológico, la Red ECOS está integrada por 26 instituciones académicas de la capital y desarrolla trabajos inter y transdisciplinarios que buscan mejorar la calidad de vida de los habitantes de la metrópolis y la resiliencia urbana, a través de investigación aplicada en temas como: redes sismológicas y gestión integral del riesgo; electromovilidad, energías limpias y biodiesel como combustible para transporte; gestión del agua; conservación ambiental; regulación y cambios normativos; fortalecimiento de la educación superior; diseño y desarrollo de materiales; ciencias de la salud y envejecimiento; y activación física y deportiva.
En esta ecuación de la ciencia y la política pública, son necesarios el financiamiento y la creación de nueva infraestructura para contribuir a resolver problemas de la metrópoli. En 2019 se implementó el primer Observatorio de Desarrollo e Innovación Tecnológica (ODIT) de la Ciudad de México, como herramienta de identificación de capacidades y recursos institucionales en tecnología para facilitar la toma de decisiones. En esta lógica, a inicios de 2020 comenzó la edificación del Centro de Investigación sobre el Envejecimiento, dada la importancia que ha cobrado y cobrará en el futuro el envejecimiento de la población de la capital, considerando sus implicaciones biológicas, sociales, económicas y culturales. En el proyecto confluirá una alianza multiactor de centros de investigación científica, médica y social, tanto nacionales como internacionales.
Otro medio implementado es la cooperación internacional como un eje transversal para la solución innovadora de los problemas de la urbe. Para ello se fomenta la colaboración con otros países, como sucedió con la Embajada de Finlandia para el lanzamiento del concurso Reto CDMX, en el que participaron instituciones públicas, privadas, sociales y académicas. Los proyectos ganadores atendieron los retos de movilidad –mediante el diseño y fabricación de un scooter eléctrico a partir de plástico reciclado– y de economía circular –que propuso contenedores de acero inoxidable reutilizables para la entrega de comida, que son recolectados, lavados y entregados a los restaurantes para eliminar el uso de productos desechables.